Ni mas ni menos que unas Dunas de arena en medio de Fiji, eso es lo que nos encontramos a poco mas de 30 minutos de nuestro hotel.
Esta zona esta protegida como parque natural y, menos mal, porque fijo que hubiera llegado el hotel de turno a construir una monstruosidad de cinco estrellas.
El parque Natural tiene una pequeña sala donde puedes ver la historia de las dunas, fotografías de hace varios años y las posibles rutas que puedes seguir. El camino lo han marcado con palos de colores según las rutas para que no te pierdas. La entrada cuesta $5.
La verdad es que es interesante, pero al llegar a la playa uno se queda un poco chafado. Y es que la playa no es apta para el baño debido a las fuertes corrientes (no hay mas que ver los troncos que han sido arrastrados en la arena). Y eso, digo yo, ya te lo podían decir antes de pegarte la caminata de mas de media hora, duna para arriba, duna para abajo, con ese calorcito que hace en la isla.... :-(
De todas maneras merece la pena verlo. :-D
Muy interesante, pero si que es cierto que te podían avisar antes de llegar que no es apta para el baño menudo planchazo!!!!
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