Erase una vez una niña que hacia ballet y danza... ya, historia de la abuela cebolleta, que conste que no es obligatorio leerlo.
El caso es que esta niña, empezo la carrera de Danza en el "
Real Conservatorio de Danza de Madrid". Bueno, esta niña, llamada Elena y su gran amiga llamada Helena...y no, no es coña.
El caso es que muchos, muchos años despues, concretamente el 19/06/1998 terminamos la carrera de danza..uno de los dias mas felices de nuestra vida.
Pero claro, como no todo es la danza, entre medias nos dedicamos a sacarnos nuestra carrera en la universidad...Yo acabe dando clases de danza durante mis años universitarios y, desde el año 2000 no me he vuelto a calzar los zapatos de tacon, la falda de faralaes ni las castañuelas...solo me he calzado las deportivas para ir al gym.
Bueno, desde el año 2000 hasta hace 3 semanas...que emepce mis clases de danza en Cardiff!!
Decir que el primer dia estaba mas perdida que un topo, las piernas no me respondian y me sentia como un pato. El nivel, aunque no es super profesional, es muy bueno. Hacemos zapateados, alegrias, soleas, bulerias, castañuelas....me encanta!!
Pero todo en esta vida es practica y, aunque ya no tengo 19 años y mi cuerpo no es el mismo (eso si, increiblemente las faldas todavia me caben y me puedo mover en ellas), estoy disfrutando como una enana. Me encanta y lo echaba de menos.
Paradojas de la vida la otra Helena tambien ha empezado danza en una academia (sin habero hablado antes, ha sido por casualidad), por el mismo motivo, lo echaba de menos.
Y es que cuando te pasas 12 años bailando 5 horas al dia y le dedicas tantas lagrimas, sudor y sangre...es muy complicado que la pasion por la danza se pueda reemplazar por otra actividad.